viernes, 30 de septiembre de 2022

Javier Marías / Rainer Maria Rilke a la espera

Rainer Maria Rilke



Javier Marías
Rainer Maria Rilke a la espera

    Cuando Rainer Maria Rilke era muy joven, fue a visitar al viejo Tolstoi en su finca de Yasnaya Polyana. Caminaban por el campo en compañía de la ubicua Lou Andreas-Salomé, y Tolstoi le preguntó a Rilke: «¿A qué se dedica usted ahora?», a lo que el poeta contestó natural y tímidamente: «A la lírica». Según parece, lo que recibió en respuesta fue no sólo una sarta de insultos, sino una diatriba en toda regla contra todo tipo de lírica, algo a lo que en modo alguno podía dedicarse nadie.
    No cabe duda de que al joven Rilke las palabras del anciano maestro ruso tuvieron que entrarle por un oído y salirle por otro, ya que pocos poetas ha habido en la historia que más se hayan dedicado, precisamente dedicado, de manera obsesiva y excluyente, no sólo a la lírica sino exactamente a todo tipo de lírica. Rilke hacía lírica en sus poemas, pero también en sus prosas, en sus diarios, en sus cartas, en sus crónicas, en sus cuadernos de viaje, en su teatro. Cada vez que cogía la pluma, aunque sólo fuera para pedir un favor, hacía lírica, y no siempre de la más elevada. A decir verdad, y al menos en sus comienzos, era bastante dado al halago, y no se limitaba a mostrar un interés desmedido por la obra de otros o a alabarla, sino que como mínimo en dos ocasiones se ofreció a escribir sendos volúmenes sobre dichas alabadas obras: cumplió con el ofrecimiento en el caso del escultor Rodin, de quien además fue secretario una temporada, y —quizá para su fortuna— no llegó a cumplirlo con el pintor español Zuloaga, si bien tuvo claro durante algún tiempo en qué iba a consistir el proyecto: «Ese libro ardiente lleno de flores y danzas». Quién sabe si la vehemencia de Rilke no se diluyó en parte debido a una fiesta española a la que asistió en casa de Zuloaga en París, con motivo del bautizo del hijo de éste en 1906, y de la que el cronista de un periódico madrileño dejó constancia: «El guitarrista Llovet asombró con sus primores de ejecución, y el guitarrista Palmero acompañó flamencamente a la "bailaora" Carmela, dislocada y dislocadora en tangos como el del "morrongo" ante el buen abate Brebain, que contemplaba el baile estupefacto». No se sabe de la reacción de Rilke, pero por lo menos después de la fiesta hizo lírica, esto es, escribió un poema previsiblemente titulado «La bailarina española».

Rainer Maria Rilke / Día de otoño




Rainer Maria Rilke

DÍA DE OTOÑO

Señor: ya es tiempo. Fue largo el verano.
Sobre relojes de sol vierte tu sombra,
y el vendaval arroja sobre el suelo llano.

Ordena su plenitud a los últimos frutos;
dales aún dos días del tiempo del sur,
a su punto de madurez llévalos y aún
la dulzura atrapa en el pesado vino puro.

Quien no tenga morada no hará ninguna.
Quien solo vive ha de seguir en su alta
vigilia y leer y escribir largas cartas
y errar por las calles estrechas, desnudas
sin paz, cuando el viento agite la hojarasca.

París, 1902




Rainer Maria Rilke
HERBSTTAG

Herr, es ist Zeit. Der Sommer war sehr groß.
Leg deinen Schatten auf die Sonnenuhren,
und auf den Fluren lass die Winde los. 

Befiehl den letzten Früchten, voll zu sein;
gib ihnen noch zwei südlichere Tage,
dränge sie zur Vollendung hin, und jage
die letzte Süße in den schweren Wein. 

Wer jetzt kein Haus hat, baut sich keines mehr.
Wer jetzt allein ist, wird es lange bleiben,
wird wachen, lesen, lange Briefe schreiben
und wird in den Alleen hin und her
unruhig wandern, wenn die Blätter treiben. 

21.9.1902, París



Rilke visitado por Zagajewski, Premio Princesa de Asturias

Rilke
Rilke visitado por Zagajewski, Premio Princesa de Asturias

Adam Zagajewski, que recibe hoy el Premio Princesa de Asturias de las Letras, escribió un excelente ensayo sobre el gran poeta checo en lengua alemana. Una lectura que deja frases y pasajes inolvidables recogidas en este artículo por el escritor colombiano

Darío Jaramillo Agudelo
20 de octubre de 2017

A la hora de hacer la lista de los grandes poetas vivos en todas las lenguas, uno de los nombres obligatorios es Adam Zagajewski, polaco nacido en Lvov (hoy Ucrania) en 1945. Además de varios libros de poemas, de él, en castellano, hay una excepcional autobiografía, En la belleza ajena (Pre-Textos), simplemente una obra maestra. Además de gran poeta es, también, un excepcional ensayista; varios de sus textos en prosa han sido publicados en Acantilado. El último en aparecer es Releer a Rilke, un hermoso ensayo sobre el autor de las Elegías de Duino: un gran poeta escribe sobre otro gran poeta, y lo lee como un autor que estuvo más allá de su propio tiempo –“apenas tiene nada que ver con las circunstancias externas de su época”– y que permanece en nuestros días. Zagajewski deja un hermoso testimonio de su primera experiencia con Rilke: “Cuando siendo todavía un estudiante de instituto (…) compré (…) Elegías de Duino, (…) leí por vez primera las mágicas frases de la primera elegía. La calle desapareció de repente, se evaporaron los regímenes políticos, el día se volvió intemporal, me topé con la eternidad y la poesía despertó”. A propósito de Rilke, el polaco va dejando sabias lecciones para quien escriba poesía, como cuando dice: “Hay al menos dos grandes traiciones que le acechan a todo poeta, una de las cuales consiste en olvidar el dolor de la historia moderna en nombre de una vida espiritual a la que no han afectado los acontecimientos, y otra relacionada con el prestar atención al dolor de la historia moderna pero olvidando la delicada e innombrable sustancia de nuestra interioridad”. Hermoso libro.

jueves, 29 de septiembre de 2022

Tumbas / Monteiro Lobato

Triunfo en la tumba de Monteiro Lobato

Monteiro Lobato
Taubaté, 18 de abril de 1882
São Paulo, 4 de julio de 1948
Cemitério da Consolação





Esta tarde fui por tercera y última vez al Cemitério da Consolação a buscar a Monteiro Lobato. En dos días dejo  São Paulo. Caminé por aquí y por allá, en un cementerio que me parece cada vez más grande y donde las tumbas cambian de lugar. Hay parranda en las noches. Al amanecer, los finados tratan de dejar las cosas tan como estaban, pero algo se nota. 

Tumbas / Raúl Gómez Jattin



Raúl Gómez Jattin
31 de mayo de 1945 -22 de mayo de 1997
Cementerio de Cereté, Colombia


Raúl Gómez Jattin 

Una visita a su tumba

Por Diana Estrella Castilla 



“Yo tengo para ti mi buen amigo
un corazón de mango del Sinú”.
Raúl Gómez Jattin

En el cementerio de Cereté, justo al pie de un roble que parece tocar el cielo, reposan los restos de Raúl Gómez Jattin, uno de los poetas más leídos en Latinoamérica. El próximo 22 de mayo se cumplirán 15 años de la muerte del autor cordobés, quien partió de este mundo tras ser arrollado por una buseta en inmediaciones de la escultura India Catalina, en Cartagena, el 22 de mayo de 1997.

Tumbas / Jan Neruda

Jan Neruda

Jan Neruda
(1834 - 1891)

Grave of Jan Neruda



TUMBAS
Jan Neruda

Jan Neruda, poeta, cuentista, dramaturgo y novelista, fue uno de los principales representantes del realismo checo y miembro de la Escuela de Mayo. Su apellido inspiró el seudónimo de Pablo Neruda a Ricardo Neftalí Reyes Basoalto, quien además cambió su acentuación a grave.

miércoles, 28 de septiembre de 2022

Muere la escritora Hilary Mantel, reina de la novela histórica

Hilary Mantel



Muere la escritora Hilary Mantel, reina de la novela histórica

La autora británica fallece a los 70 años. Con su trilogía sobre el estadista inglés Thomas Cromwell, que mantuvo en el poder a Enrique VIII, ganó dos premios Booker



Juan Carlos Galindo
23 de septiembre de 2022


Inglaterra ha perdido dos reinas en poco tiempo. Tras el fallecimiento de Isabel II, la autora inglesa Hilary Mantel ha muerto este viernes a los 70 años. Su trilogía sobre Thomas Cromwell (más de 2.000 páginas de ficción histórica acerca del reinado de Enrique VIII y el hombre que lo mantuvo en el poder) la catapultó a la fama y la convirtió en la reina de la novela histórica contemporánea. Un camino que tardó en encontrar pero que le rindió innumerables réditos literarios y económicos. Es la única mujer galardonada en dos ocasiones con el premio Booker a la mejor novela del año en lengua inglesa: en 2009 por En la corte del lobo y en 2012 por Una reina en el estrado, ambas publicadas en español por Destino. “Estamos devastados por la muerte de nuestra querida autora Hilary Mantel. Solo podemos estar agradecidos por el magnífico trabajo que nos deja”, ha asegurado su editor, Bill Hamilton, en un comunicado. Mantel padecía problemas crónicos de salud y hace tiempo que luchaba contra un dolor constante y una fatiga crónica derivados de una endometriosis.

Hilary Mantel / “La historia debe ser peligrosa”



Hilary Mantel


Hilary Mantel: “La historia debe ser peligrosa”

BIOGRAFÍA

La escritora sufre para terminar la trilogía de Cromwell, como si se resistiera a regresar de una época fascinante en la que lleva años sumergida


Pablo Guimón
26 de enero de 2016

Hilary Mantel, nacida en el norte de Inglaterra hace 63 años, eligió la escritura porque sus ritmos arbitrarios se adaptaban a los que imponía su mala salud. Se zambulló sin red en el oficio. Un éxito apabullante le sobrevino a los 57 años, con su décimo libro, después de casi cuatro décadas de carrera. En la corte del lobo (2009) fue la primera de sus novelas de Thomas Cromwell, el estratega de Enrique VIII que aporta una nueva luz a la manida época de los Tudor. Aquel libro, convertido después en popular serie de televisión, revitalizó un género denostado. Si hoy abunda la narrativa histórica con personajes reales, es por Hilary Mantel. Tanto En la corte del lobo como su continuación (Una reina en el estrado, 2012) obtuvieron el Premio Booker, uno de los más prestigiosos de la lengua inglesa. Algo insólito. Hoy Mantel sufre para terminar la trilogía, como si se resistiera a regresar de una época fascinante en la que lleva años sumergida. Entretanto, se publica en España Experimento de amor. Una novela, escrita en 1995, sobre tres jóvenes mujeres que luchan por abrirse paso en el mismo mundo hostil en que creció la autora. Un ejemplo de la fina literatura contemporánea que practicó después de no lograr publicar su primera novela —un tomo sobre la Revolución Francesa que nadie comprendió que era posmoderno y que vería la luz años después— y antes de que Cromwell la arrastrara de vuelta a su terreno natural. Su marido, un científico a quien ella siguió por África y Arabia Saudí y que ahora es su asistente, abre la puerta de su coqueto apartamento de las afueras de Londres, donde la escritora atiende sus compromisos profesionales. Lejos del refugio junto al mar, en Devon, donde vive, Hilary Mantel habla, con un hilo de voz pausado, de una pasión que vive con una intensidad y un compromiso fuera de lo común.

Hilary Mantel / “Me interesa menos la realeza que quienes nacen en la oscuridad”

 

Hilary Mantel

Hilary Mantel: “Me interesa menos la realeza que quienes nacen en la oscuridad”


BIOGRAFÍA


La escritora británica, ganadora de dos premios Booker, pone fin a su trilogía sobre Thomas Cromwell con las 960 páginas de 'El trueno en el reino' y anuncia que dejará de novelar a los Tudor

Juan Carlos Galindo
28 de agosto de 2020

Nunca sabremos si la carrera de Hilary Mantel habría alcanzado la cima mundial de la novela histórica sin ese cúmulo de problemas de salud que fueron arrinconando su actividad laboral cotidiana y dejando la escritura como asidero. Nunca sabremos si, por otro camino, la mujer que a finales de los años setenta trataba sin mucho éxito de vender una novela de más de 700 páginas sobre la Revolución Francesa habría tenido a principios del siglo XXI siete años para cerrar su trilogía sobre Thomas Cromwell, más de 2.000 páginas de ficción histórica acerca del reinado de Enrique VIII y el hombre que lo mantuvo en el poder. Ahora llega a España El trueno en el reino (Destino, traducción de José Manuel Álvarez), el broche final a una serie que se inició en 2009 con La corte del lobo y siguió tres años después con Una reina en el estrado, libros que le valieron sendos premios Booker de novela en inglés –ninguna otra escritora lo ha ganado dos veces, y ahora aspira a un tercero con esta nueva obra– y le otorgaron el respeto reverencial de la crítica y unas ventas estratosféricas.

martes, 27 de septiembre de 2022

Hilary Mantel / El trueno en el reino / Cómo renovar la novela histórica

Hilary Mantel: cómo renovar la novela histórica


BIOGRAFÍA




El trueno en el reino

La herencia de Shakespeare y la penetración psicológica marcan su trilogía sobre Thomas Cromwell, cuyo último volumen publica ahora

Emilio Lara
24 de octubre de 2020

Para Miguel Delibes una novela debía cumplir la regla de las tres pes: un personaje, un paisaje y una pasión. De ese modo, en la ya célebre trilogía de la inglesa Hilary Mantel, el personaje sería Thomas Cromwell, el paisaje, Inglaterra, y la pasión, el poder. Además ha conseguido labrarse un singular territorio novelístico a través de una voz narrativa propia, un original molde literario y un ritmo hipnótico que abduce al lector al igual que los marcianos, en las películas de ciencia ficción de los años cincuenta, controlaban las mentes de los terrícolas.

Así comienza / Hilary Mantel / Una reina en el estrado





Hilary Mantel

BIOGRAFÍA


UNA REINA EN EL ESTRADO

Primera parte

I
    Halcones
    Wiltshire, septiembre de 1535
    Sus hijas caen del cielo. Él observa desde la silla del caballo, atrás se extienden acres y más acres de Inglaterra; caen, las alas doradas, una mirada llena de sangre cada una. Grace Cromwell revolotea en el aire tenue. Es silenciosa cuando atrapa su presa, y silenciosa cuando se desliza en su puño. Pero los ruidos que hace entonces, el susurrar y el crujir de plumas, el suspiro y el roce del ala, el pequeño cloqueo de la garganta, ésos son sonidos de reconocimiento, íntimos, filiales, casi reprobatorios. Tiene franjas de sangre en el pecho y le cuelga carne de las garras.

Así comienza / Hilary Mantel / En la corte del lobo


Hilary Mantel

BIOGRAFÍA

EN LA CORTE DEL LOBO


Primera parte

I
Hacia el otro lado del estrecho


    Putney, 1500
    —Vamos, levántate.
    Ha caído derribado, aturdido, mudo; desplomado cuan largo es en el empedrado del patio. Ladea la cabeza, vuelve los ojos hacia el portón, como si pudiese llegar alguien a ayudarle. Un solo golpe, en el lugar adecuado, podría matarle ahora.

lunes, 26 de septiembre de 2022

Pablo Neruda / Plenos poderes

 


Pablo Neruda

Biografía

PLENOS PODERES

A PURO sol escribo, a plena calle,
a pleno mar, en donde puedo canto,
sólo la noche errante me detiene
pero en su interrupción recojo espacio,
recojo sombra para mucho tiempo.

El trigo negro de la noche crece
mientras mis ojos miden la pradera
y así de sol a sol hago las llaves:
busco en la oscuridad las cerraduras
y voy abriendo al mar las puertas rota
hasta llenar armarios con espuma.

Y no me canso de ir y de volver;
no me para la muerte con su piedra,
no me canso de ser y de no ser.

A veces me pregunto si de donde
si de padre o de madre o cordillera
heredé los deberes minerales,

los hilos de un océano encendido
y sé que sigo y sigo porque sigo
y canto porque canto y porque canto.

No tiene explicación lo que acontece
cuando cierro los ojos y circulo
como entre dos canales submarinos,
uno a morir me lleva en su ramaje
y el otro canta para que yo cante.

Así pues de no ser estoy compuesto
y como el mar asalta el arrecife
con cápsulas saladas de blancura
y retrata la piedra con la ola,
así lo que en la muerte me rodea
abre en mí la ventana de la vida
y en pleno paroxismo estoy durmiendo.
A plena luz camino por la sombra.


Pablo Neruda
Plenos poderes
Losada, Buenos Aires, 1962, pp. 88-89

Pablo Neruda / La primavera

 


Pablo Neruda

Biografía

LA PRIMAVERA

El pájaro ha venido
a dar luz:
de cada trino suyo
nace el agua.

Y entre agua y luz que el aire desarrollan
ya está la primavera inaugurada,
ya sabe la semilla que ha crecido,
la raíz se retrata en la corola,
se abren por fin los párpados del polen.

Todo lo hizo un pájaro sencillo
desde una rama verde.

Pablo Neruda
Plenos poderes
Losada, Buenos Aires, 1962, p. 





Pablo Neruda / Serenata

 



Pablo Neruda

Biografía

SERENATA

Con la mano recojo este vacío,
imponderable noche, familias estrelladas,
un coro más callado que el silencio,
un sonido de luna, algo secreto, un triángulo,
un trapecio de tiza.
Es la noche oceánica, la soledad tercera,
una vacilación abriendo puertas, alas,
la población profunda que no tiene presencia
palpita desbordando los nombres del estuario.

Noche, nombre del mar, patria, racimo, rosa!


Pablo Neruda
Plenos poderes
Losada, Buenos Aires, 1962, pp. 23





Pablo Neruda / Para todos

Pablo Neruda
Pablo Neruda
Biografía

Para todos

De pronto no puedo decirte
lo que yo te debo decir,
hombre, perdóname, sabrás
que aunque no escuches mis palabras
no me eché a llorar ni a dormir
y que contigo estoy sin verte
desde hace tiempo y hasta el fin.

Yo comprendo que muchos piensen,
y qué hace Pablo? Estoy aquí.
Si me buscas en esta calle
me encontrarás con mi violín
preparado para cantar
y para morir.

No es cuestión de dejar a nadie
ni menos a aquéllos, ni a ti,
y si escuchas bien, en la lluvia,
podrás oír
que vuelvo y voy y me detengo.
Y sabes que debo partir.

Si no se saben mis palabras
no dudes que soy el que fui.
No hay silencio que no termine.
Cuando llegue el momento, espérame,
y que sepan todos que llego
a la calle, con mi violín.

Pablo Neruda
Plenos poderes
Losada, Buenos Aires, 1962, pp. 41 - 42


Pablo Neruda / Torre


Pablo Neruda

Biografía

TORRE


La línea lava el mundo,

oh inmutable frescura,

oh larga espada:

cortas

el desorden,

allí queda el naufragio,

aquí la estrella,

de punto a punto a punto

circula por la línea

la pureza

y es invariable el clima,

segura la medida,

firme el muro del ángulo

mientras el aire cambia y cruza

la torre

pura

de la geometría.


Pablo Neruda
Plenos poderes
Losada, Buenos Aires, 1962, p. 16


Pablo Neruda / Al difunto pobre

 

Zapatos viejos
Vincent van Gogh


Pablo Neruda

Biografía

AL DIFUNTO POBRE

A nuestro pobre enterraremos hoy:
a nuestro pobre pobre. 

Tan mal anduvo siempre 
que es la primera vez 
que habita este habitante.

Porque no tuvo casa, ni terreno, 
ni alfabeto, ni sábanas, 
ni asado, 
y así de un sitio a otro, en los caminos, 
se fue muriendo de no tener vida, 
se fue muriendo poco a poco, 
porque esto le duró desde nacer. 

Por suerte, y es extraño, se pusieron de acuerdo 
todos desde el obispo hasta el juez 
para decirle que tendrá cielo 
y ahora muerto, bien muerto nuestro pobre, 
ay nuestro pobre pobre 
no va a saber qué hacer con tanto cielo. 
Podrá ararlo y sembrarlo y cosecharlo? 

Él lo hizo siempre, duro
peleó con los terrones,
y ahora el cielo es suave para ararlo,
y luego entre los frutos celestiales
por fin tendrá lo suyo, y en la mesa
a tanta altura todo está dispuesto
para que coma cielo a dos carrillos
nuestro pobre que lleva, por fortuna,
sesenta años de hambre desde abajo,
para saciarla, al fin, como se debe,
sin recibir más palos de la vida,
sin que lo metan preso porque come,
bien seguro en su caja y bajo tierra
ya no se mueve para defenderse,
ya no combatirá por su salario.
Nunca esperó tanta justicia este hombre,
de pronto lo han colmado y lo agradece:
ya se quedó callado de alegría.

Qué peso tiene ahora el pobre pobre! 
Era de puro hueso y de ojos negros 
y ahora sabemos, por su puro peso, 
ay cuántas cosas le faltaron siempre, 
porque si este vigor anduvo andando, 
cavando eriales, arañando piedras, 
cortando trigo, remojando arcilla, 
moliendo azufre, transportando leña, 
si este hombre tan pesado no tenía 
zapatos, oh dolor, si este hombre entero 
de tendones y músculos no tuvo 
nunca razón y todos le pegaron, 
todos lo demolieron, y aún entonces 
cumplió con sus trabajos, ahora llevándolo 
en su ataúd sobre nosotros, 
ahora sabemos cuánto le faltó 
y no defendimos en la tierra. 

Ahora nos damos cuenta que cargamos 
con lo que no le dimos, y ya es tarde: 
nos pesa y no podemos con su peso. 

Cuántas personas pesa nuestro muerto? 

Pesa como este mundo, y continuamos 
llevando a cuestas este muerto. Es claro 
que el cielo es una gran panadería.

Pablo Neruda
Plenos poderes
Losada, Buenos Aires, 1962, pp. 32-34



domingo, 25 de septiembre de 2022

Pablo Neruda / A "La Sebastiana"

 


La Sebastiana


Pablo Neruda

Biografía

A ''LA SEBASTIANA''

YO construí la casa.

La hice primero de aire.
Luego subí en el aire la bandera
y la dejé colgada
del firmamento, de la estrella, de
la claridad y de la oscuridad.

Cemento, hierro, vidrio,
eran la fábula,
valían más que el trigo y como el oro,
había que buscar y que vender,
y así llegó un camión:
bajaron sacos
y más sacos,
la torre se agarró a la tierra dura
-pero, no basta, dijo el constructor,
falta cemento, vidrio, fierro, puertas-,
y no dormí en la noche.

Pero crecía,
crecían las ventanas
y con poco,
con pegarle al papel y trabajar
y arremeterle con rodilla y hombro
iba a crecer hasta llegar a ser,
hasta poder mirar por la ventana,
y parecía que con tanto saco
pudiera tener techo y subiría
y se agarrara, al fin, de la bandera
que aún colgaba del cielo sus colores.

Me dediqué a las puertas más baratas,
a las que habían muerto
y habían sido echadas de sus casas,
puertas sin muro, rotas,
amontonadas en demoliciones,
puertas ya sin memoria,
sin recuerdo de llave,
y yo dije: "Venid
a mi, puertas perdidas:
os daré casa y muro
y mano que golpea,
oscilaréis de nuevo abriendo el alma,
custodiaréis el sueño de Matilde
con vuestras alas que volaron tanto."

Entonces la  pintura
llegó también lamiendo las paredes,
las vistió de celeste y de rosado
para que se pusieran a bailar.
Así la torre baila,
cantan las escaleras y las puertas,
sube la casa hasta tocar el mástil,
pero falta dinero:
faltan clavos,
faltan aldabas, cerraduras, mármol.
Sin embargo, la casa
sigue subiendo
y algo pasa, un latido
circula en sus arterias:
es tal vez un serrucho que navega
como un pez en el agua de los sueños
o un martillo que pica
como alevoso cóndor carpintero
las tablas del pinar que pisaremos.

Algo pasa y la vida continúa.

La casa crece y habla,
se sostiene en sus pies,
tiene ropa colgada en un andamio,
y como por el mar la primavera
nadando como náyade marina
besa la arena de Valparaíso,

ya no pensemos más: ésta es la casa:

ya todo lo que falta será azul,

lo que ya necesita es florecer.

Y eso es trabajo de la primavera.


Pablo Neruda
Plenos poderes
Losada, Buenos Aires, 1962, pp. 35-38