María Isabel Rueda
¿El secuestro ya no es delito?
¿El secuestro ya no es delito?
La impunidad que exhiben desde La Habana le ha quitado al secuestro
la gravedad que debería tener.
1:33 a.m. | 29 de mayo de 2016
Por un momento juro que llegué a creer que a Salud Hernández-Mora le iba a pasar lo mismo que a Rosa Elvira Cely: que el Gobierno la culparía de su propio secuestro por haberse atrevido a viajar al Catatumbo “a hablar con esos señores”; una zona de 4.826 kilómetros de territorio colombiano donde la presencia del Estado es muy frágil, y parece más una república independiente de las Farc, el Eln, el Epl, las bandas criminales y los cultivadores de coca, en medio de tremendas convulsiones sociales.
El Eln ya lo había advertido: no se compromete a dejar de secuestrar, de acuerdo con la exigencia del Gobierno para sentarse a conversar. El secuestro será uno de los puntos por discutir en la agenda de negociación. Como dice el padre De Roux, el Eln insiste en ponerles “condiciones a las condiciones” de la paz.
Lo que me aterra es la demora de la Inteligencia del Estado en confirmar que la emblemática periodista colomboespañola Salud Hernández, y los dos periodistas del RCN que se fueron a recorrer sus pasos, habían sido secuestrados por el Eln. Durante 6 días de incomunicación absoluta, todos temíamos lo peor, menos el Gobierno, que todavía pensaba que el silencio de Salud se debía a que estaba muy concentrada trabajando.