Triunfo Arciniegas / El principio de la cinta transparente

Triunfo Arciniegas 

EL PRINCIPIO 

DE LA CINTA TRANSPARENTE

1

Es más fácil encontrar el principio de la cinta transparente que la honradez de un político.

2

Somos un país de políticos rastreros, astutos, perversos, y gente que les cree.

3 

Si usted cree que un político lo ama, simplemente, está meando fuera del tiesto. El político sólo se aprovecha. El político busca su voto. Al político le interesa, en primer lugar, él mismo, y en segundo, su propio círculo.

4

El político va tras el poder al precio que sea. La política, como los negocios, no tiene corazón. Y hay algo todavía más terrible: la política funciona con las leyes del hampa.

5

Si usted espera o recibe agradecido el abrazo de un político, usted da lástima, y en cierta forma se merece la vida miserable que seguramente lleva.

6

Todos, absolutamente todos los políticos, hablan del cambio. Del mañana. De lo sabroso que será el mañana. En fin, del paraíso. Todos hablan de transparencia. Todos hacen miles de promesas. Eso nunca cambia. Y siempre hay gente que les cree y hasta se hace matar por esta plaga. Eso tampoco cambia.

7

Así como en las esquinas de la noche policías y ladrones se reparten el festín, en los festines de los palacios del poder los políticos de la más diversa calaña se reparten el desangrado corazón del país.