Eva García Sáenz de Urturi

Entrevista a Eva García Sáenz de Urturi, autora de “El silencio de la ciudad blanca”

“Si escribes de lo que conoces vas a tener más tiempo libre”

Javier Velasco Oliaga
17 de abril de 2016

Eva García Sáenz de Urturi, autora de la novela negra “El silencio de la ciudad blanca”, ha dado un giro a su carrera novelística con su nueva obra. Hasta ahora, llevaba publicadas tres novelas históricas, alejadas de su tierra. Cantabria y la aún más lejana Tahití fueron los lugares de sus obras. Ahora ha decidido ubicar su nueva novela en la tierra en la que nació, Vitoria. Su nueva entrega es una vigorosa novela negra en las calles de la ciudad que la vio nacer.

Si hasta ahora sus lecturas favoritas eran las novelas históricas, tanto escribir sobre temas históricos le han cansado y ha cambiado sus gustos. “Llevo un tiempo leyendo novelas negras”, confiesa en la entrevista que mantuvimos en un conocido restaurante de Vitoria. Hasta ahora su pasión había sido la historia y más concretamente la arqueología. Ahora son los crímenes y la investigación policial. “Para prepararme para escribir esta novela, contacté con una academia que preparaba policías, y allí hice dos cursos, uno avanzado de Inspección Técnica ocular y otro de revelado de huellas”, explica.

“Pero no vale sólo con hacer el curso, allí había que empollar para aprobarlos. Afortunadamente, mi conocimientos de optometrista me ayudaron bastante”, explica Eva García Sáenz de Urturi. Titulada en Optometría, trabajó en varias empresas del sector óptico hasta que decidió optar por un puesto de profesora en la Universidad de Alicante, a donde se trasladó. Pero su trabajo no terminaba de llenarla y decidió ocupar su tiempo libre con la escritura. Debido al éxito que tuvo su primera novela, “La saga de los longevos”, dejó la universidad y ahora se dedica a escribir y dar cursos de creación literaria.

Cuando se puso a escribir su última novela, “El silencio de la ciudad blanca”, quería que fuese una obra literaria, nada nórdica y con mucha parte psicológica. “Yo tengo muchos lectores de más de 60 años a los que no les gusta la violencia o la tortura. Por eso quería centrarme más en la parte de perfilación de personajes, sobre todo de los asesinos. Éstos funcionan con un principio económico para que no los pillen”, desgrana la autora de la novela negra.

El protagonista de la novela es Unai López de Ayala, inspector de la policía. “Me ha encantado meterme en un personaje masculino. No quería contar nada con un tono sexista, eso ya está contado. Lo que sí quería es que los personajes femeninos tuviesen, también mucha fuerza”, señala en la entrevista que mantuvimos y añade: “cuanto más grande y fuerte es el antagonista del protagonista, más empatiza el lector con él”.

Cuando Eva García se pone a escribir sus novelas, ya tiene planificada casi toda la trama. “En ocasiones me tiro un año entero planificando la escaleta de la novela para que quede todo muy imbricado. Con el borrador de esta última estuve cuatro meses. Si escribes de lo que conoces vas a tener más tiempo libre para estar con la familia”, expone con rotundidad. Sus dos hijos pequeños la reclaman mucho tiempo, como para desperdiciarlo.

De todos los personajes que hay en la novela, hay uno al que le tiene especial cariño y es el condenado por los crímenes ocurridos hace veinte años, Tasio Ortiz de Zárate. “Es un personaje que se ha adaptado a su nueva vida y lo ha hecho bien”, menciona. En la cárcel ha estudiado y se ha convertido en un reconocido guionista televisivo que utiliza técnicas similares a las que utiliza la escritora.

Aunque en España se den más los asesinos en masa, este es más un hecho histórico y puntual, mucho más difícil de novela cuando sólo hay un único hecho. “Los crímenes que perpetra un asesino en serie, dan mucho más recorrido a un policía. Ya en Vitoria hubo un célebre asesino en serie conocido como el Sacamantecas. Al ubicarlo en mi ciudad, me ha sido muy fácil documentarme y muchos sitios los conocía a la perfección”, analiza con sagacidad policiaca. Y ha quedado muy contenta con el resultado de la ubicación: “el feedback que me está viniendo de los vecinos es muy positivo”, dice.

Cuando se le pregunta por qué decidió dedicarse a la escritura, responde con todo lujo de detalle. “Trabajaba en la Universidad de Alicante y no estaba muy contenta, necesitaba evadirme de vez en cuando. Mi subconsciente vino a mi rescate y recordé mi años de infancia en los que viví un ambiente muy literario. Me puse a documentarme sobre la historia de Cantabria para escribir La saga de los longevos. Estuve tres años haciéndolo”, recuerda con una sonrisa en los labios.

Ese gusto por la historia se nota en su nueva novela. “Los crímenes tienen un poso histórico, todos se cometen en lugares con historia. Quería que fuese una novela negra pero que quedase lo más elegante posible. Quise centrarme en la investigación”, desgrana poco a poco. La novela tiene varios homenajes a sus series de televisión favoritas. Por ejemplo, Peio, es un homenaje a Hugo de "Perdidos".

Para finalizar, nos desvela algunos de sus secretos mejor guardados. “El lector 0 es mi marido. A él no le gusta leer, por eso si la novela no tiene mucho ritmo, se aburre y deja de leer. Si deja de hacerlo ya sé que no voy bien”, nos descubre. De ahí que para conseguir ese ritmo deseado prefiera escribir en primera persona, aunque las partes que se ubican en los años setenta lo haga con narrador omnisciente.

Tras su fichaje por la editorial Planeta, su carrera ha dado un vuelco importante, aunque en la anterior la trataron bien, pero quería una mayor difusión y distribución que solo muy pocas editoriales pueden hacer. La editorial ha apostado fuertemente por ella con buen tino ya que Eva García Sáenz de Urturi consigue un maridaje perfecto entre las tramas y el ritmo con el que se cuenta la historia.

TODO LITERATURA