Nace el viceministerio
para la Suprema Felicidad Social del Pueblo Venezolano
El presidente Maduro crea una nueva instancia para supervisar los programas sociales ideados en colaboración con La Habana
Caracas 25 OCT 2013 - 05:25 CET
Para el chavismo la felicidad es un asunto de interés nacional y puede permanecer en forma de decreto. Para refrendar esa cosmovisión su líder máximo, el presidente Nicolás Maduro, ha decidido crear el Viceministerio para la Suprema Felicidad Social del Pueblo Venezolano. La nueva instancia supervisará los programas sociales llamados Misiones, creados en 2003 gracias a la estrecha relación entre Caracas y La Habana.
El gobernante venezolano ha decidido llamar de esa forma a la nueva estructura en honor a su padre político, Hugo Chávez, y al libertador Simón Bolívar. Por sugerencia de su esposa, Cilia Flores, Maduro ha decidido que ese despacho sea una gran oficina de beneficencia con un mando centralizado, donde cursen reclamos y necesidades de los venezolanos más vulnerables y el Gobierno tenga claro a quién pedir cuentas. El jefe del despacho será el ex diputado Rafael Ríos y contará con la colaboración del médico del primer Chávez, Julio César Alviarez, y de Absalón Méndez.
El anuncio se hará oficial una vez que aparezca en la Gaceta Oficial de este viernes. El gobierno considera que sus programas sociales trascienden el alcance del Estado de Bienestar porque saldan la deuda social acumulada antes de su llegada al poder. “Estas misiones tenemos que llevarlas hasta el cielo en agradecimiento a Hugo Chávez”, reiteró Maduro desde el Palacio de Miraflores en Caracas.
En realidad Chávez relanzó su presidencia tras masificar estos programas sociales gracias a una sugerencia que le hiciera Fidel Castro en 2003, en vísperas de un referéndum revocatorio solicitado entonces por la oposición. Las Misiones son la gran fortaleza clientelar del chavismo y por esa razón el gobierno quiere reforzarlas en plena crisis de abastecimiento. A través de esos programas, por ejemplo, se brinda atención médica a las comunidades más humildes, se ofrece oportunidades de estudios o se atienden a los ancianos y a las personas con discapacidad.
El presidente volvió a reiterar su anuncio de la víspera: el próximo 8 de diciembre será el primer día de la lealtad con Chávez y pidió a la Fuerza Armada Nacional que difunda el pensamiento del líder bolivariano entre sus simpatizantes. Maduro ha convertido a su gobierno en un diario homenaje a la obra de su líder. La fecha coincidirá este año con la celebración de las elecciones municipales que la oposición ha tomado como la primera prueba de fuego que enfrentarán los herederos.
Para el chavismo la felicidad es un asunto de interés nacional y puede permanecer en forma de decreto. Para refrendar esa cosmovisión su líder máximo, el presidente Nicolás Maduro, ha decidido crear el Viceministerio para la Suprema Felicidad Social del Pueblo Venezolano. La nueva instancia supervisará los programas sociales llamados Misiones, creados en 2003 gracias a la estrecha relación entre Caracas y La Habana.
El gobernante venezolano ha decidido llamar de esa forma a la nueva estructura en honor a su padre político, Hugo Chávez, y al libertador Simón Bolívar. Por sugerencia de su esposa, Cilia Flores, Maduro ha decidido que ese despacho sea una gran oficina de beneficencia con un mando centralizado, donde cursen reclamos y necesidades de los venezolanos más vulnerables y el Gobierno tenga claro a quién pedir cuentas. El jefe del despacho será el ex diputado Rafael Ríos y contará con la colaboración del médico del primer Chávez, Julio César Alviarez, y de Absalón Méndez.
El anuncio se hará oficial una vez que aparezca en la Gaceta Oficial de este viernes. El gobierno considera que sus programas sociales trascienden el alcance del Estado de Bienestar porque saldan la deuda social acumulada antes de su llegada al poder. “Estas misiones tenemos que llevarlas hasta el cielo en agradecimiento a Hugo Chávez”, reiteró Maduro desde el Palacio de Miraflores en Caracas.
En realidad Chávez relanzó su presidencia tras masificar estos programas sociales gracias a una sugerencia que le hiciera Fidel Castro en 2003, en vísperas de un referéndum revocatorio solicitado entonces por la oposición. Las Misiones son la gran fortaleza clientelar del chavismo y por esa razón el gobierno quiere reforzarlas en plena crisis de abastecimiento. A través de esos programas, por ejemplo, se brinda atención médica a las comunidades más humildes, se ofrece oportunidades de estudios o se atienden a los ancianos y a las personas con discapacidad.
El presidente volvió a reiterar su anuncio de la víspera: el próximo 8 de diciembre será el primer día de la lealtad con Chávez y pidió a la Fuerza Armada Nacional que difunda el pensamiento del líder bolivariano entre sus simpatizantes. Maduro ha convertido a su gobierno en un diario homenaje a la obra de su líder. La fecha coincidirá este año con la celebración de las elecciones municipales que la oposición ha tomado como la primera prueba de fuego que enfrentarán los herederos.
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