Lo terrible y lo hermoso
Cada persona debería descubrir qué la hace sentirse así de conectada y de viva. Sentirse parte de un engranaje en el que todas las piezas son igual de indispensables.
Sara Jaramillo Klinkert
14 de abril de 2024
Sara Jaramillo Klinkert
14 de abril de 2024
Madrid, 15 de abril de 2024
Lorrie Moore Foto de John Foley |
La escritora firma una original 'road movie', ambientada justo antes de las elecciones estadounidenses de 2016, que protagonizan una mezcla de vivos, fantasmas, zombis y moribundos
Marta Rebón
15 de abril de 2024
Si este no es mi hogar, no tengo un hogar es una novela de tres diálogos en dos planos temporales que, hacia el final, se entrecruzan formando un mismo instante. Uno (¿el último?) es entre Finn, un profesor un tanto conspiranoico y amargado que se siente ajeno a la generación de sus alumnos, y su hermano Max, ingresado en un centro para enfermos terminales, al que visita. Otro es entre Finn y su aún amada expareja, Lily, a la que el can negro de la depresión ha llevado al filo de la muerte en varios intentos de suicidio.
Traducción de Albert Fuentes. Seix Barral. 288 páginas. 19,90 € Ebook: 9,99 €
Mientras Finn y Max hablan de todo y de nada, el primero recibirá la llamada que le informa de que Lily, esta vez, ha conseguido quitarse la vida, a pesar de estar ingresada en un centro de salud mental. Cuando llegue allí se encontrará con que ya la han enterrado en un cementerio ecológico. Eso no lo detendrá para emprender un viaje en coche al sur con ella, aún con algunos gusanos asomando de su cadáver. Porque Lily es ahora un zombi con el que puede tener una última oportunidad de comprensión mutua.
Y el tercero es un diálogo unidireccional, a modo de diario, entre una mujer que regenta un hotel en el territorio de la antigua Confederación, en torno a 1871, y su hermana muerta. Finn lo encontrará en la habitación del hotel en el que pernocta con Lily. El plantel de la novela, pues, es una mezcla de vivos, fantasmas, muertos vivientes y moribundos.
Que Lorrie Moore (Glens Falls, 1957), especialmente conocida por sus relatos -véanse las mil páginas de sus Cuentos completos, (Seix Barral)-, haya ambientado su road movie zombi unas semanas antes de las elecciones norteamericanas de 2016 y que Finn, al ir a visitar a su hermano, pase por la Torre Trump, acordonada como un "auténtico Checkpoint Charlie", e intente quitarle de la cabeza que el estrafalario magnate tenga alguna oportunidad de ganar -"No te borres de la vida pensando que Trump será presidente. No te vayas con esa alucinación o entonces sí que me sabrá mal por ti», le dice al pie de la cama-, no puede ser casual.
Como tampoco lo es que las "cartas" que se intercalan las escriba una mujer de la posguerra en la que el secesionismo sigue latente y que, de entre todos los personajes históricos, Finn sienta debilidad —o, mejor dicho, devoción— por Abraham Lincoln, cuando desde un tiempo a esta parte se ha ensayado profusamente en Estados Unidos sobre la posibilidad, aunque se quiera improbable, de una nueva guerra civil. Este detalle, además, nos recuerda a los lectores la novela de George Saunders, inspirada en la anécdota según la cual Lincoln, desconsolado por la muerte de su hijo, entró varias veces en su cripta para sostener su cuerpo inerte. "Quizá me quedé atrapada en la puerta giratoria del bardo", piensa Lily cuando Finn le pregunta si de verdad ha muerto.
¿Acaso el adiós sobrenatural de Finn al amor de su vida, con todos sus defectos, sea una alegoría de la despedida a un país en estado de descomposición? ¿Es el humor que utiliza la autora una tabla de salvación?"Los chistes son dispositivos de flotación en el gran mar de una vida de pesares. Son las señales de salida en un cuarto muy oscuro", reflexiona Lily, que en vida se vestía de payaso y practicaba risoterapia para "intentar arrancar a la gente, en su mayoría niños, de las garras de la tristeza".
Más bien, aludiendo al título, la pregunta primordial sea qué es un hogar, si un espacio físico o un sentimiento interior que nunca nos abandona, ni siquiera ante la muerte. Finn y Lily, que parecen sacados de un filme de Jim Jarmusch, tenían una relación difícil, pero el viaje "final" por carretera parece reconciliarlos. "¿Has pensado alguna vez que las relaciones que todos mantenemos con los demás son un invento? ¿Pero que a veces tienes la suerte de conseguir que otra persona participe del invento contigo?", formula Finn. Lástima que la buena premisa de esta novela, que solo brilla fugazmente, derive en un viaje a ninguna parte.
EL MUNDO
Lucy según Henry González |
Recién cumplidos los ochenta, Ismail Kadaré publica La Muñeca (Alianza), una suerte de homenaje a su madre y un recorrido por el "aislado" país en el que creció. El gran escritor albanés, eterno candidato al Premio Nobel, recibe a El Cultural en su casa de París, en donde reside gran parte del año. Y habla de genios y falsos prestigios, de su vida al servicio de una vocación, de fascismo, comunismo y de los desnortes europeos.
Mauricio Vargas
14 de abril de 2025
El presidente Gustavo Petro está perdiendo la compostura. Las amenazas que sueltan él y algunos de sus ministros más abyectos, como el de Salud, Guillermo Jaramillo, y el del Interior, Luis Fernando Velasco, son muestra de un gobierno debilitado por consecutivas derrotas, que quiere aparecer fuerte a punta de intimidaciones.
"No había ardillas que corrieran de un árbol al otro,
las tablas del puente, desgastadas, estaban manchadas y mohosas.
El tono era desesperado, el amor de las muchachas imposible,
los poemas apenas un montón de palabras yéndose de las manos,
y el alma continuaba sosteniéndonos, no lo sabíamos".
Juan Felipe Robledo
Medellín, 13 de abril de 1968
Preocupa la situación financiera de los puntos de atención en la ruta de caminantes para refugiados y migrantes.
Valentina Robles Angarita
15 de abril de 2024
En Colombia, cientos de migrantes venezolanos se la juegan día a día. Los llamados “caminantes”, aquellos que van a pie por las calles y que se observan en las vías nacionales con bolsos y grandes sacos llenos de comida o ropa, están en riesgo por el posible cierre de los centros de atención.
Vivien Leigh y Marlon Brando Un tranvía llamado Deseo |
Marlon Brando |
Elsa Fernández-Santos
12 de abril de 2024
Kristen Stewart es un ídolo generacional al que es difícil resistirse. La actriz con los ojos más bonitos de Hollywood lleva tatuado en el brazo derecho el ojo del Guernica de Picasso. Heredera de Jodie Foster en el olimpo de las estrellas LGTBI, Stewart interpretó con 12 años a su hija en el thrillerde David Fincher La habitación del pánico. Desde entonces, su filmografía es el fascinante espejo de una carrera tan popular (la saga de Crepúsculo) como compleja y osada (Viaje a Sils María, Personal Shopper, Spencer). A sus 34 años, convertida en abierta musa queer, algo impensable hace no tanto, Stewart vuelve a ofrecer muestras de su particular instinto como estrella en la loca y salvaje Sangre en los labios.
Alex Vicente
Berlín, 12 de abril de 2024
Sentada en la recepción del mugriento gimnasio que regenta en medio del desierto de Nuevo México, Kristen Stewart (Los Ángeles, 34 años) parece soñar con una vida lejos de tan penoso lugar. Peinada con un asimétrico corte mullet —corto por delante, largo por detrás— y vestida con estudiado desaliño, aparece en pantalla por primera vez para desatascar un inodoro. A su alrededor, cuerpos sudorosos se someten a la dictadura del fitness y se inyectan cócteles de anabolizantes para plegarse a su dogma: sin esfuerzo no hay recompensa; no se gana músculo sin sufrir. “El dolor es la fragilidad que abandona el cuerpo”, reza un cartel colgado en la pared. Sucede en los EE UU de finales de los ochenta, los del reaganismo tardío, pero podría transcurrir en cualquier lugar del mundo en la actualidad.
Kristen Stewart, sin pantalones, en el estreno de Sangre en los labios en Los Ángeles.Credit...Emma Mcintyre/Getty Images
En la gira de prensa para “Sangre en los labios”, su nueva película, la actriz vistió mucho mensaje bajo poca ropa.
Vanessa Friedman
Incluso en el contexto de la tendencia de no usar pantalones que prevalece ahora en las pasarelas y en algunos círculos de celebridades, así como la moda de la vestimenta temática en los estrenos de cine, los atuendos de Kristen Stewart durante su gira de prensa para Sangre en los labios han destacado. Pocas veces una actriz se ha desnudado de forma tan gloriosa.
Endre Penovác (n. 1956, Tornjos, Serbia) es famoso por elaborar obras de arte cautivadoras usando las líneas y tonos mínimos requeridos para dar vida a sus sujetos. Su técnica basada en la tinta logra magistralmente un equilibrio entre brillo y oscuridad, densidad y transparencia, dando como resultado impresionantes representaciones de animales.