Barbara Bargiggia |
EVA DURÁN
SEIS POEMAS
Aunque no me ames
y no desees en tu boca
mis pequeños senos
muy suavemente... amanece
LA COLECCIONISTA
Me gusta esperarte en la tarde
ajustarme el corsé
humedecerme por dentro
para que llegue tu cuerpo
ciudadano del fuego
su penetrante rumor
su enervante silencio
amo la perversión de tus ojos
la medianoche en el bar
entregarme de
adentro
mis objetos favoritos son
el suave almohadón
la autopista hasta ti
la memoria y tu cuerpo
ajustarme el corsé
humedecerme por dentro
para que llegue tu cuerpo
ciudadano del fuego
su penetrante rumor
su enervante silencio
amo la perversión de tus ojos
la medianoche en el bar
entregarme de
adentro
mis objetos favoritos son
el suave almohadón
la autopista hasta ti
la memoria y tu cuerpo
La mujer que amaste
en la noche del vino
La hechicera
que danzó sobre ti
que te besó en el espejo
Ha colmado su cuerpo
con la música
y nada guarda
en honor de tu nombre
Ni siquiera
el consuelo pueril
de su desprecio
en la noche del vino
La hechicera
que danzó sobre ti
que te besó en el espejo
Ha colmado su cuerpo
con la música
y nada guarda
en honor de tu nombre
Ni siquiera
el consuelo pueril
de su desprecio
la pervertida
la niña buena de habitación celeste
la silenciosa amante de raíces hondas
la noche encendida que se vuelve
piel
la obicua irremediable
que se marcha siempre
sin dar un beso
sin confesar que es feliz
que le gusta estar viva
que haber nacido le basta
y que aprendió a perdonar
por sobre todas las cosas
y que por eso precisamente
tiene las manos llenas
por eso canta en la
madrugada
por eso sonríe cuando le llaman loca
que llego desnuda al corazón
del mango
sin tenedor ni cuchillo
cerrando los ojos
masticando despacio
y que amanece contigo
por puro
despiste
porque no espera nada
porque le gusta comerte
porque lee a Fallaci
porque te ama
NO IMPORTA CUANTAS VECES
no importa cuántas veces
hayas perdido la inocencia
siempre vendrá a ti un hombre
que invoque la magia
y la recupere para ti
luego
por la maravilla de la inercia
te deshojara pétalo a pétalo
dejándote desnuda
liviana
lista para la próxima vez
para el próximo milagro
hayas perdido la inocencia
siempre vendrá a ti un hombre
que invoque la magia
y la recupere para ti
luego
por la maravilla de la inercia
te deshojara pétalo a pétalo
dejándote desnuda
liviana
lista para la próxima vez
para el próximo milagro
PALABRAS FINALES
(Si quieren tomarlo como epitafio son libres de hacerlo)
Eva del Pilar Durán
no conoció el arrepentimiento
ni por la humedad de su cuerpo
ni por el fuego de sus lagrimas
buscó la verdad suprema en las revistas
deshojó planetas
construyó imperios de caramelo
cosechó en las nubes
violó normas
mordió el polvo
y fue inferior a sí misma
el mundo no demorará
mucho tiempo en olvidarla
no conoció el arrepentimiento
ni por la humedad de su cuerpo
ni por el fuego de sus lagrimas
buscó la verdad suprema en las revistas
deshojó planetas
construyó imperios de caramelo
cosechó en las nubes
violó normas
mordió el polvo
y fue inferior a sí misma
el mundo no demorará
mucho tiempo en olvidarla
Eva Durán
El jardín donde vuelan los mares
Berlín, Café Berlín, Colección Reloj de Arena, 2007
Bella por dentro y por fuera,y sobretodo valiente.Bienaventurada Cartagena que engendró a esta niña, esta mujer, a esta poeta.
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