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miércoles, 13 de noviembre de 2024

Álvaro Pombo gana el premio Cervantes de literatura

Álvaro Pombo gana el premio Cervantes de literatura




RECONOCIMIENTO

El autor cántabro ha logrado el gran galardón de las letras en español por “un mundo literario propio imperecedero e imprescindible que conmueve y conduele”


 Justo Barranco

Madrid, 12 de noviembre de 2012


El escritor cántabro Álvaro Pombo (Santander, 1939), letra j minúscula de la RAE y faro indiscutible del último medio siglo de la literatura española con unas novelas que combinan una narración adictiva cercana a lo oral con una profunda carga filosófica y moral se ha hecho este martes con el Premio Cervantes, el gran premio de las letras en español. Un galardón dotado con 125.000 euros y con el que se ha alzado desbancando a los autores que lideraban la quiniela de este año, que apostaba por escritoras latinoamericanas como Margo Glantz o Gioconda Belli. El jurado, presidido por el anterior premio Cervantes, Luis Mateo Díez, ha concedido el galardón a Pombo “por su extraordinaria personalidad creadora, su lírica singular y su original narración”. 

“A su notabilísimo nivel como poeta y ensayista -han añadido- se une el ser uno de los grandes novelistas de nuestra lengua que indaga en la condición humana desde las perspectivas afectivas de unos sentimientos profundos y contradictorios. En sus creaciones, muestra el mundo a través de la construcción de un lenguaje en el que las deformaciones de la realidad aparecen reflejadas bajo el disfraz de la ironía y del humor. En su prosa, la oralidad se refleja en la voluntad de un estilo que aspira al ”escribo como hablo“ valdesiano”. Y han asegurado que “Álvaro Pombo ha creado aquello que define a los grandes escritores, un mundo literario propio imperecedero e imprescindible que conmueve y conduele”.

Licenciado en Filosofía y Letras por la Complutense y bachelor of Arts en la misma disciplina por el Birkbeck College de Londres, residía justamente en la capital británica cuando publicó su primer libro de poemas, Protocolos (1973), escrito en los años sesenta. Desde entonces ha sido considerado una voz única en la literatura española. Y ha ganado todos los premios posibles, también los más comerciales, desde el Planeta con La fortuna de Matilde Turpin al Nadal con El temblor del héroe. 

Un galardón, el Nadal, con el que en 2012 declaraba divertido que “he sido especialista en ganar premios hasta el día de hoy y he dejado de serlo en este punto y hora porque ya no me quedan premios por ganar. Pero, ¡qué triste! Bueno, me queda el Nobel sí, pero eso no me toca. A ver cómo demonios vivo yo ahora. He agotado toda la premiación de España”. Sin embargo, se equivocaba, y ahora llega la culminación de su carrera con el Cervantes.

De hecho, una década después de Protocolos fue merecedor del primer Premio Herralde con la novela El héroe de las mansardas de Mansard, aunque su obra cumbre se considera El metro de platino iridiado, publicada en 1990, ganadora a su vez del Premio Nacional de la Crítica.

Autor de una extensa obra narrativa, ha escrito las novelas El hijo adoptivo(1984), llevada al cine con el título El juego de los mensajes invisibles (1992); Los delitos insignificantes (1986); El metro de platino iridiado (1990); Aparición del eterno femenino contada por S. M. el Rey (1993); Telepena de Celia Cecilia Villalobo (1995); Vida de San Francisco de Asís (1996); Donde las mujeres (1996); La cuadratura del círculo (1999); El cielo raso (2001); Una ventana al norte(2004); Contra natura (2005); La fortuna de Matilda Turpin (2006); Virginia o el interior del mundo (2009); La previa muerte del lugarteniente Aloof (2009); El temblor del héroe (2012); Quédate con nosotros, señor, porque atardece (2013); La transformación de Johanna Sansíleri(2014); Un gran mundo (2015); La casa del reloj (2016); Retrato del vizconde en invierno (2018); El destino de un gato común (2020), y Santander, 1936(2023).


LA VANGUARDIA



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